La consultoría empresarial: ¡Necesitamos replantearla!

Bola de cristal, bola de cristal: dime cómo puedo reducir costes, dime cómo puedo crecer en un sector determinado, dime cómo puedo aumentar la productividad, dime cómo debo estructurar mi departamento de recursos humanos.

Y aparece una consultora que se dedica a hacer todas las preguntas al equipo para dar las respuestas que ha recogido sazonadas con su visión al equipo directivo. Una visión que es propia y separada de la empresa, de una persona que no tiene por qué compartir los mismos objetivos ni valores que esta.

La empresa gana unos cacahuetes y la consultora se queda con mucho más que el dinero del cliente: se quedan con la sabiduría de cómo cambiar, cómo adaptarse a los nuevos tiempos, cómo ser más eficientes, cómo ser más productivos.

Todo lo importante se lo ha quedado la consultora, la empresa ha creído que no sabe y crea una dependencia muy difícil de romper.

¿Ahora, como empresario, cómo puedes ir a tus trabajadores y decirles que confías en ellos si para las cosas importantes no lo haces?

Ésto es el antítesis de fortalecer una empresa, se le ha dado el resultado sin lo más importante: el proceso que lleva hasta él.

Una empresa mucho más que un éxito necesita una forma de trabajar que garantice que estos van a llegar constantemente.

¿Quiere decir que una empresa nunca debe pedir ayuda?

Al contrario. Muchos empresarios lo son porque son personas geniales, aunque suele suceder que no tienen conocimientos sólidos sobre empresa y aunque los tengan, siempre existe nueva información, más conocimiento o nuevas formas de trabajar.

Entonces, ¿cuál son los criterios para garantizar que una consultora deja poso constructivo?

  1. Un proceso de consultoría no puede ser que la empresa deje unos datos, éstos se procesen en una caja negra y devuelvan un resultado que no sabemos cómo se ha construido.
  2. Todo proceso de consultoría debe crear un cambio en las personas del departamento para que adquieran nuevas formas de pensar u obtengan nuevas herramientas de trabajo.
  3. Todo proceso de consultoría debe fortalecer el vínculo entre sus empleados y sus directivos.
  4. Toda consultora al terminar el proceso debe ser prescindible.

Podría nombrar muchas grandes empresas donde el procedimiento estándar es que cuando se quiere un cambio se llama una consultora para que lo dirija.

Esto parte de que muchos directivos desconocen a su equipo y no confían en ellos, porque es imposible confiar en alguien que no conoces.

Y también es imposible que la empresa llegue a su máximo nivel teniendo a la cabeza desconectada del cuerpo.

Contratar a una consultora para que tomen las decisiones hace que los empleados se sientan menospreciados, que efectivamente lo están siendo.

Lo irónico del tema es que algunas de ellas luego contratan a otra consultora para que les diga cómo vincular más a sus empleados.

Y podemos hablar de técnicas de motivación, de felicidad del empleado, del employee experience, que en inglés vende mucho más, al final todo es tremendamente sencillo:

Todos somos personas. Las personas tienen ojos, tienen corazón y tienen necesidades.

La forma de vincularlos no puede ser otra que realmente creer en ellos, escucharles, darles voz e incluso darles voto. Ésto que parece tan sencillo es lo verdaderamente esencial y es la fuente de todo el resto.

Las relaciones humanas son la columna vertebral de la empresa.

¿Cómo puede una cabeza decirle a unos pies que caminen si no ha preguntado antes a los ojos si hay un acantilado delante?

Cuando tengamos esto fuerte, la innovación, la creatividad, la gestión de los errores, todo surgirá de manera fácil y sencilla, o si no lo hace, podemos contratar a alguien que nos enseñe a hacerlo, no que nos diga lo que tenemos que hacer.

Es de sabios pedir ayuda cuando encontramos un límite que no sabemos superar y sabemos que la ayuda es buena cuando al terminar somos más fuertes y estamos más unidos.

Justamente por esto y para esto hemos creado humanleadership.net , queremos acompañarte a que seas más grande y queremos que seas tan grande que no nos necesites.

¿Quieres tomar tu siguiente paso?

Empieza evaluando el Nivel de tu empresa.

¡Buen día!

Xavi Roca-Cusachs Pericas

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